Estrogenos y mama

A pesar de muchos años de investigación, aún no hay conclusiones definitivas respecto de la relación que pueda haber entre el uso de estrógenos en el período de la menopausia y el cáncer de mama. De los estudios desarrollados, algunos muestran que el uso de estrógenos aumenta el riesgo, otros que no lo modifican y otros muestran que reducen el riesgo. Sin embargo, no es posible extraer conclusiones definitivas a partir de ellos dado que no son exactamente comparables debido a que tanto el tipo de hormonas, la forma en que se usan y el tipo de mujeres que las usan son diferentes.

Sin embargo, si se rescatan los datos de grupos grandes de mujeres que son comparables se puede elaborar algunas conclusiones, aunque estas no serán definitivas:

• El riesgo de sufrir un cáncer de mama aumentaría con el uso de terapia hormonal de reemplazo en la menopausia.
• Este aumento del riesgo es mayor mientras mayor sea el tiempo de uso de la hormona.
• El aumento del riesgo es menor en mujeres de mayor peso.
• El riesgo desciende después de 2 años de haber suspendido los estrógenos.
• En las mujeres que han usado terapia hormonal de reemplazo los cánceres se diagnostican más grandes y más avanzados. Sin embargo son de comportamiento menos agresivo.
• En las mujeres que usan THR es mucho mayor el número de mamografías anormales.

Adicionalmente debe considerarse que si bien el uso de estrógenos disminuye el riesgo de osteoporosis y de enfermedad de Alzheimer, después de 5 ó 6 años de uso aumenta el riesgo de coágulos en la sangre (trombosis), infarto cardíaco y derrames cerebrales.

En atención a estos datos, hoy en día se recomienda ser cuidadoso con el uso de terapia hormonal de reemplazo en la menopausia. En general, podría decirse que la conducta adecuada al respecto es:

• No usar estrógenos si no son necesarios.
• Si hay pocos síntomas, usar alguna terapia alternativa.
• Si se va a usar estrógenos, SIEMPRE hacer una mamografía antes de comenzar la terapia y luego otra una vez al año.
• Usar las dosis más bajas posibles.
• No usar los estrógenos por más de 6 años.

En este momento no se sabe si hay alguna diferencia al usar estrógenos inyectables, en parches o en otro tipo de forma puesto que los estudios al respecto son insuficientes.